Para la retro review dominical de hoy, os traemos un juego que siempre me pareció bastante curioso porque decidió apostar por dos tecnologías que aún estaban en un estado de desarrollo inicial: la digitalización de personajes o actores reales y el uso del 3D que, si bien ya había juegos que lo utilizaban, aún era una tecnología a la que le quedaba mucho por avanzar.

Konami fue una de las compañías más prolíficas en el mundo de las máquinas recreativas. Muchos de sus títulos dejaron huella en los jugadores de la época, los cuales aún recordamos estos juegos con gran cariño. Uno de sus juegos más recordados es Sunset Riders, un título basado en el Salvaje Oeste y el cual ya recordamos hace bastantes años en esta humilde web. No obstante, este no fue el primer juego de Konami con esta temática, ya que antes vinieron Badlands y Iron Horse. Hoy vamos a hablar del segundo, el cual es un juego de acción que nos pone en la piel de un aguerrido cowboy.

Retro Review de Jabato [Recordando]

Entre los años 50 y 60, con la editorial Bruguera al frente, el cómic español vivió probablemente su etapa más dorada, antes de que la llegada de las grandes americanas como MarvelDC relegasen al cómic nacional a un segundo plano. Sin embargo, la popularidad de algunos de sus personajes aún resonaban en los 80, como son los casos de El Capitán TruenoEl Jabato. Prueba de ello es que ambos tuvieron su adaptación a los videojuegos, en el caso del primero fue un juego de acción, del que ya hablamos en NoSoloBits y en el caso del segundo, del que vamos a hablar hoy, en forma de aventura conversacional.

La compañía Data East realizó durante las décadas de los 80 y 90 numerosos juegos que son iconos de la época, como Burger Time, Joe & Mac, Tumblepop o Windjammers. Aunque gran parte de su catálogo son franquicias propias, también desarrolló juegos basados en algunas licencias cinematográficas como RoboCop, de la cual adaptó la primera y segunda parte de la saga. La primera parte ya la analizamos hace unos años y hoy le toca el turno a la segunda parte, la cual es interesante porque varia bastante de la primera entrega, mezclando esta vez los géneros beat 'em up y run and gun.

Los años 80 fue el florecimiento del terror teenager, que ya dio señales de vida a finales de la década anterior. Géneros como el terror sobrenatural o el slasher camparon a sus anchas, robando el corazón cinéfilo de miles de jóvenes que alquilaban las ya extintas cintas de VHS para pasar miedo en grupo en la casa de alguien.