Justamente hoy es el día de Navidad, así que con aún más motivo toca recordar un juego navideño. Esta vez le toca a un plataformas tan entretenido como desconocido. El título que nos ocupa es Santa Claus Jr. Advance, el cual nos cuenta la aventura de un joven para salvar la Navidad.

Hace una semana escasa, dándome mi vuelta diaria por tuiter, un usuario publicó una captura de un juego que accedió a un lugar de mi memoria totalmente sepultado. Recordaba haberlo jugado siendo un crío, incluso que había cosas que me llamaban poderosamente la atención, pero no recordaba el título ni la compañía ni nada con lo que buscar. Así que lo más normal en estos casos, es preguntar amablemente al usuario por el juego, a lo que contestó amablemente: Moonstone: A Hard Days Knight.

El título que nos ocupa hoy es Antarctic Adventure, un clásico de Konami que se originó en MSX, un ordenador en el que está compañía hizo verdaderas maravillas, como el propio Antarctic Adventure u otros juegos como Metal Gear o Vampire Killer.

Como sabemos que lo estábais deseando, volvemos a una review de una aventura gráfica, con la no demasiado conocida ni tampoco exitosa Ringworld: Revenge of the Patriarch. Sin embargo, el mundo en el que se basa, el Mundo Anillo, sí lo es, especialmente entre los amantes de la ciencia ficción, quienes tienen a Larry Niven, su autor, en un pedestal. No confundid con el Mundo Disco de Terry Pratchett y sus adaptaciones al videojuego, de las que quizá podamos hablar algún día.

A mediados de los 80 empezó a popularizarse el género de shooter run and gun en vista aérea, impulsado en gran parte por el éxito del arcade Commando de Capcom. Después de su éxito, salieron numerosos juegos de este tipo, muchos de ellos de ambientación militar. Data East, que se atrevía con cualquier género, no quiso dejar pasar la oportunidad y creó Heavy Barrel, nuestro protagonista de hoy.