Recordando
Retro Review de Snoopy & The Peanuts

Aventura gráfica con el simpático beagle

Hoy vamos a hablar de un juego al que le tenías bastante cariño cuando era pequeño, aunque no me lo llegué a acabar nunca (creo que el hecho de que estuviera en inglés, tampoco me ayudaba demasiado). Este sencillo juego no es otro que Snoopy & The Peanuts (conocido también como Snoopy: The Cool Computer Game), desarrollado por The Edge, una pequeña compañía nacida como una escisión de Softek, cuando un grupo de programadores y músicos decidieron probar suerte en solitario.

El personaje de Snoopy es conocido incluso en la actualidad, siendo imagen hasta de una compañía de seguros. Este simpático beagle fue creado por Charles Schulz en el año 1950, cuando apareció la primera tira cómica. Cómo curiosidad, en un principio el perro se iba a llamar "Sniffy", algo que en España no hubiera sonado bien, pero finalmente decidieron cambiarle el nombre al existir otra tira con un perro con dicho nombre.

El juego fue pensado para los más pequeños de la casa, por lo que la mecánica del juego es realmente sencilla. Se desarrolla como una aventura gráfica pero con una mecánica simplificada (por ejemplo, el juego no tiene un inventario como tal) para que los jóvenes jugadores no se frustrasen o no entendiesen qué estaba sucediendo. Básicamente el juego consiste en recoger ciertos objetos y utilizarlos o dejarlos en los lugares apropiados para seguir avanzando en la aventura, pero, Snoopy sólo puede cargar un objeto, que llevará en las manos para que tengamos claro siempre el objeto en cuestión.

También hay ciertas pantallas que requerirán un poco de habilidad, como cruzar un río saltando sobre los objetos que se hunden y sobresalen (haciéndolo cuando sobresalgan, obviamente), o reventar un globo apuntando con un tirachinas para coger un objeto que cuelga de él.

Una de las cosas que más llama la atención del juego es el colorido de los escenarios, con gráficos sencillos pero muy efectivos. También el mapeado cuenta con distinto tipos de lugares para darle variedad al juego, cómo las casas de algunos personajes como Charlie Brown, dueño de Snoopy, el instituto, un río, etc.

Sólo hay una cosa que me desesperaba de pequeño y que lo sigue haciendo: lo lento que se mueve Snoopy. Para ir de un sitio a otro te estabas un buen rato, normalmente iba saltando para avanzar un poco más rápido.

No es un juego que haya pasado a la historia, pero siempre tendrá mi huequecito en mi corazón, un recuerdo de cuando era pequeño.