Recordando
Retro Review de DuckTales

Patos en busca de riqueza

Poca gente desconoce al Tío Gilito del mundo de Disney, un pato tan rico que puede bañarse en una piscina llena de sus monedas de oro. En 1987 se empezó a emitir una serie llamada DuckTales que nos explicaba las aventuras de Gilito McPato y sus tres sobrinos Juanito, Jorgito y Sergito. Obviamente estos nombre son traducciones libres que se hicieron en nuestro territorio, los nombres originales son, respectivamente, Scrooge McDuck, Huey, Dewey y Louie. Además de los personajes principales, en los episodios podíamos ver a otros miembros de la familia, entre ellos el mismísimo Donald. En 1989 se publicó un excelente plataformas que se posicionó por méritos propios entre los mejores de la consola NES.

DuckTales fue desarrollado y publicado por Capcom en 1989 para NES. El título fue desarrollado por el equipo encargado de dar vida a Mega Man, otro de los grandes títulos de Capcom para NES, y con este desarrollo también hicieron un trabajo excelente. Los coloridos gráficos, el excelente control, la jugabilidad no lineal y la inconfundible música son algunos de los puntos que hicieron que este juego se convirtiera en el más vendido de Capcom para NES, vendiendo 1.6 millones de copias en todo el mundo. En 1990 se realizó una versión para Game Boy que también fue el juego más vendido de Capcom para la plataforma, con 1.4 millones de copias vendidas.  En el año 1993 se publicó la segunda parte, la cual es muy parecida a la primera entrega. En 2013 se publicó un remake del juego llamado DuckTales Remastered para PC, Xbox 360, Playstation 3 y Wii U. Por último, el juego viene incluido en la colección de juegos clásicos The Disney Afternoon.

El tío Gilito quiere ser el pato más rico del mundo, superando a su rival Flintheart Glomgold (aquí conocido como Isidoro Dorado). Para ello, tiene que buscar cinco tesoros escondidos en diferentes partes del mundo. Una vez haya recogido todos los tesoros, tendrá que viajar a Transylvania para enfrentarse a su rival y decidir quien es el pato con una mayor fortuna.

Al empezar la partida lo primero que podemos hacer es elegir a cual de los 5 niveles queremos ir primero. El juego se puede completar en cualquier orden, aunque en algunos niveles tendremos que tener algún objeto que encontramos en otro nivel para poder avanzar, como por ejemplo una llave que encontramos en Transylvania para poder acceder a las Minas Africanas. Lo que hace realmente especial a este juego es la habilidad de Gilito usando su bastón. En el suelo, puede usar su bastón como un palo de golf para golpear a enemigos o a objetos para romperlos o lanzarlos contra los enemigos. Aunque la habilidad más interesante está en el salto, ya que puede usar su bastón como si fuera un Pogo Saltarín, y de esta forma atacar a los enemigos desde arriba, poder acceder a sitios elevados y poder pasar por superficies peligrosas sin sufrir daño.

El principal objetivo del juego es conseguir la mayor cantidad de dinero posible. Para ello tenemos que recoger una serie de diamantes que encontramos en los niveles. Estos diamantes están escondidos por el escenario y se revelarán cuando pasemos sobre ellos, y también metidos en cofres que podemos abrir con nuestro bastón. En los cofres también encontramos otros objetos, como comida que rellenará nuestros puntos de vida, una medalla que nos vuelve invencible durante unos segundos o un destello que aumenta nuestra vida máxima en un punto.

El juego está lleno de enemigos que no quieren que consigamos los tesoros. Cada vez que recibamos un golpe, perdemos un punto de vida, y si llegamos a cero empezaremos desde el último punto de control del nivel en el que estemos. Al final de cada nivel hay un jefe final guardando el tesoro que tanto deseamos conseguir. Por suerte, también contramos a algunos amigos en los niveles que nos darán pistas o diferentes ayudas como comida para que rellenemos nuestra vida.

Dependiendo de nuestros logros al finalizar el juego veremos uno de los tres finales diferentes. El final malo lo veremos si llegamos con 0 dólares al final del juego (algo realmente difícil, ya que vamos recogiendo dinero constantemente). El final bueno lo veremos si conseguimos los dos tesoros escondidos y llegamos con más de 10 millones de dólares al final del juego. El final común (que también es bueno, dicho sea de paso) lo veremos en cualquier otro caso.

A nivel técnico es una delicia. El control responde a las mil maravillas. Los escenarios son muy coloridos y con multitud de elementos destruibles y secretos por descubrir. Los personajes están muy bien animados y definidos. Por último, la música está formada por melodías alegres y pegadizas que seguro recordaremos. En conjunto, un juego bien trabajado de principio a fin.

Una pequeña curiosidad de la jugabilidad es que podemos rellenar nuestra barra de vida pulsando el botón Select. Eso sí, para poder hacerlo tenemos que gastar 3 millones de dólares. Parece que Gilito tiene un seguro de salud extremadamente caro.

En definitiva, DuckTales es un juegazo de Capcom que me maravilló siendo pequeño, y jugándolo hoy en día veo que sigue mantiendo esa gran jugabilidad que lo alzó como uno de los mejores plataformas para NES. Al principio su dificultad puede resultar frustrante, pero ofrece tres niveles de dificultad diferentes, y además al jugar unas cuantas partidas podremos ir superando los diferentes retos que nos presenta. Un juego altamente recomendado.