Recordando
Retro review de Home Alone

Defendiendo la casa

En la retro review de hoy vamos a hablar de Home Alone, videojuego basado en la película "Solo en casa", protagonizada por el aquel entonces adorable Macaulay Culkin. Fue lanzado en 1991 para diferentes plataformas (PC, Amiga, Mega Drive, SNES...) aprovechando el grandísimo tirón que obtuvo la película en cines justo unos meses antes.

El argumento es de sobras conocido: la familia McCallister decide marcharse a París de vacaciones navideñas. Sin embargo, se ovlidan de su hijo pequeño (¿Quién puede olvidarse a su hijo?), pero el pequeño Kevin es un chico con muchos recursos y suficientemente capaz de defender la casa familiar de un par de vulgares ladrones, interpretados por Joe Pesci y Daniel Stern.

Tras una pequeña secuencia inicial donde se nos muestra la casa y como los padres de Kevin cogen el avión, empezará el juego que se dividirá en dos fases bien diferenciadas. En la primera de ellas dispondremos de un tiempo limitado para conseguir colocar el máximo número de trampas posibles.

Para ello, deberemos movernos por toda la casa cogiendo los objetos y colocándolos en los lugares donde creemos que tendrán más éxito. Por poner varios ejemplos, podremos coger un libro y ponerlo encima de una puerta entreabierta para que cuando uno de los malvados ladrones la abra, le caiga el peso de la literatura encima de su cabeza, o poner un monopatín justo al inicio de las escaleras para que se pegue un buen costalazo. En la interfaz superior veremos la hora, para saber cuanto nos queda, así como el número de trampas seteadas y los ítems que en ese momento llevamos encima (tenemos un máximo de 3).

Los lugares donde podemos colocar las trampas aparecerán marcados por una cruceta y hemos de tener en cuenta que solo podremos colocar una trampa por lugar, por lo que deberemos escoger qué lugar es mejor para cada objeto, aunque en la mayoría de ocasiones el juego no es lo suficientemente complejo como para que esto tenga una transcendencia real, con un poco de sentido común tendremos suficiente. Hay dos objetos que tienen algo más de gracia, uno de ellos es la tarántula, puesto que se moverá a su libre albedrío por la casa, y la otra es la escopeta, que nos resultará imprescindible para poder accionar algunas trampas como globos de agua o hacer reventar un extintor.

Una vez transcurrida la hora (hora del juego, no real) de la que disponemos para colocar todas las trampas, empezará la segunda fase del juego, en la que los ladrones entran en acción. Para este momento, más nos vale haber cogido la escopeta o la echaremos mucho en falta. En esta fase del juego, en la interfaz veremos a los dos ladrones, Harry y Marv, en la parte superior, y podremos ver que les está sucediendo, si van caminando o se han topado con alguna trampa, así como un contador de trampas sufridas por cada uno.

Básicamente lo que tenemos que hacer es evitar que nos cojan, por lo que tendremos que utilizar el salto para evitar nuestras propias trampas que haya en el suelo, así como aprovechar cuando han sido objetos de una trampa para poder pasar por delante de ellos sin que nos atrapen. El objetivo final para ganar la partida es conseguir que cada uno de ellos se tope con 10 trampas y se retiren de la casa, después si queremos mejorar nuestro hi-score, también contará el tiempo en que lo hagamos.

Si nos atrapan, pues mal asunto, perderemos la partida. Si no, asistiremos al final feliz del juego y el bueno de Kevin habrá dado su merecido a los ladrones.

El juego resulta demasiado sencillo y poco rejugable, una vez finalizado una vez no invita mucho a volverlo a jugar, el control a veces resulta algo torpe y las transiciones entre pantallas un poco lentas. En definitiva, un juego bastante mediocre cuya única finalidad era aprovechar el tirón comercial de la película y que, desde luego, no será recordado por su calidad.