Recordando
Retro Review de Football Manager

El tatarabuelo de PC Fútbol

En la retro review de hoy os traigo el juego cuya versión en ZX Spectrum más horas me hizo pasar delante del ordenador: Football Manager. Para aquellos jugadores más jóvenes o que entraron más tarde en este mundillo, seguramente el primero que recuerden sea el inigualable PC Fútbol de DinamicChampionship Manager. Pero no fueron los pioneros en el género de los simuladores deportivos, ya que en el año 1981 aparecía este título de Addictive Games, que revolucionaría a la reducida comunidad gamer de aquella época.

El juego contó con diferentes versiones adaptadas al país, utilizando los nombres de los equipos patrios y de jugadores que se encontraban en esas ligas en concreto por aquella época. Por ejemplo, en la versión española podíamos tener en nuestra plantilla a jugadores como Maradona o Sarabia, mientras que podíamos dirigir desde el Real Madrid o el FC Barcelona, pasando por el Real Betis y llegar hasta el Orihuela.

Lo primero que nos pedirá el juego al arrancarlo es decidir qué equipo queremos dirigir, el nivel de dificultad (7 niveles) y el color de nuestro equipo, pudiendo elegir entre blanco o negro (las limitaciones de la época). Una vez hecha esta elección, iremos al panel principal de opciones donde podremos ir al mercado de fichajes o al listado de jugadores, a la clasificación, pedir o pagar un préstamo, así como cambiar el nivel de dificultad o grabar la partida.

Si elegimos el listado de jugadores, podemos confeccionar cual será nuestro once titular en el próximo partido. En este listado veremos la información necesaria de cada jugador: nombre, dorsal, habilidad, energía y valor. Los dos valores más importantes son la habilidad (indica la calidad del jugador) y la energía (si el jugador está muy cansado, no rendirá bien). Como apunte, los jugadores se lesionan y se indica en este listado con una "i" de injured en color verde y no podrán ser alineados.

Desde ese mismo listado podremos vender a nuestros jugadores. El valor de cada uno de ellos va variando con el tiempo, así que es posible que un mismo jugador entre y salga de nuestro equipo según nos convenga.

Antes de cada partido se nos mostrará un pequeño informe de la puntuación de nuestro equipo y el rival tanto en energía como moral, así como en las distintas líneas (defensa, mediocentro y ataque). Antes de empezar el partido también podremos hacer los cambios necesarios para ajustar nuestro once titular.

El partido es una sucesión de situaciones de ataque y defensa. El equipo atacante dispondrá de 3 jugadores y el defensor otros tres más el portero. Básicamente, un atacante aparecerá en un punto aleatorio del margen de la pantalla con la pelota y todos los jugadores atacantes avanzarán horizontalmente. El jugador de la pelota, en un cierto momento, realizará un chute que puede ser en linea recta o en cruzado, si en la trayectoria intercepta a otro de nuestros jugadores, este puede cambiar la dirección de la pelota, para bien o para mal. En cambio, si la trayectoria es interceptada por un defensor, la jugada de ataque quedará abortada. Por otra parte, el portero se mueve en vertical para defender su portería. No tiene más, y el jugador no puede realizar ninguna acción más, su trabajo ya está hecho confeccionando la alineación. Aunque la mecánica pueda parecer muy sencilla, el juego resultaba enormemente adictivo.

Al final de cada partido se nos mostrará el resultado final del partido y el dinero recaudado en las taquillas de nuestro estadio, en caso de jugar de local. También se nos mostrará el listado de resultados de los otros equipos de nuestra liga, así como la clasificación actualizada. Por último, se nos mostrará un informe de nuestro estado financiero: facturas de la semana (sueldos de jugadores, alquiler del campo e intereses de los préstamos) y nuestro balance de dinero actual.

Antes de volver a la pantalla principal, se nos mostrará el mercado de jugadores, donde podremos hacer nuestra oferta por alguno de ellos, indicándonos posteriormente si la oferta ha sido aceptada o rechazada.

Como es lógico, Football Manager palidece ante la complejidad de los simuladores futbolísticos de hoy en día, pero como todo tiene un origen y en este caso resultó ser muy entretenido, tenía que tener su rincón en la sección.